Conjunto de principios y técnicas mediante las cuales una sociedad decide y organiza la propiedad y asignación de los recursos económicos.
En un extremo, habitualmente denominado sistema de libre empresa, todos los recursos son de propiedad privada. Este sistema, según Adam Smith, se basa en la creencia de que el bien común se maximiza cuando se permite que cada miembro de una sociedad persiga sus propios intereses. En el otro extremo, generalmente denominado sistema comunista puro, todos los recursos racionales son de propiedad del Estado. Este sistema, según Karl Marx y Vladímir Lenin, se basa en la creencia de que se requiere de la propiedad estatal de los medios de producción y el control gubernamental sobre cada aspecto de la economía para minimizar las desigualdades en la riqueza y lograr otros objetivos sociales consensuados. No existe ninguna nación en que se aplique alguno de estos extremos. En la medida en que se pasa del capitalismo al socialismo y finalmente al comunismo, aumenta la participación del Estado en la propiedad de los recursos productivos y hay una mayor dependencia de la planificación económica. El fascismo es un sistema híbrido, más bien político que económico, donde los recursos de propiedad privada se combinan en consorcios y se ponen a disposición de un Estado de planificación centralizada.
Enciclopedia Universal. 2012.